jueves, 9 de abril de 2020

Efectos en Salud Mental debido al Aislamiento Obligatorio. Una experiencia propia. Perito Forense Ricardo Alberto Suarez Castro



Escribo este articulo con el fin de dar a conocer mi experiencia personal  debido a la situación dentro del Aislamiento decretado por las autoridades en cuanto a la crisis sanitaria que se vive en Colombia y las consecuencias en términos de Salud Mental que estoy viendo en las personas que están a mi alrededor, tanto de amigos, familiares, conocidos, clientes, pacientes, abogados, en fin, hasta los seguidores de mis paginas sociales; esto lo hago, para ilustrar bajo mi percepción como experto forense la situación que se esta presentando y que vendrá en cuanto a la salud mental de los colombianos, que de por sí, no se ha analizado por parte de las autoridades sanitarias y menos por el Gobierno Nacional o local.

Desde que empezó a llegar la información sobre el virus y su posible llegada a Colombia las autoridades y los medios de comunicación empezaron a bombardear a los colombianos con información sobre lo que nos iba a pasar debido a la “letalidad” de un virus desconocido, información sin sustento científico en su momento, pero que de todas formas sustentada por expertos que decían que en Colombia en cierta fecha (¿?), iban a haber cientos de contagiados y un sin número de muertos debido al renombrado virus, diariamente se encontraba por la redes sociales y medios de comunicación múltiples “noticias” sobre muertos, contagiados, curas milagrosas, opinión de expertos (generalmente políticos o analistas económicos), en fin, la población entró en pánico (panicoronavirus lo bautice), y la gente empezó a decir… “quédate en casa”, “no salga porque se infecta”, y lo peor … “va a infectar a los demás, si sale a la calle”, “irresponsable”… en fin…

Por parte del gobierno se tomaron muchas decisiones, entre ellas declarar la calamidad sanitaria y hasta ecológica, suspendieron clases en los centros educativos en general, se suspendieron labores en entidades oficiales (poder judicial, entre ellas) y poco a poco el comercio se cerró, miles de personas se quedaron sin trabajo (entre ellas como dicen los boyacenses, mi persona), especialmente de personas y profesionales independientes, personas que viven del día a día para sobrevivir, se hizo un “simulacro” de aislamiento “decretado” de un día para otro y … ¡cundió el pánico…! (palabra muy conocida por un personaje de la televisión), las personas desesperadas fueron a los supermercados y arrasaron hasta con el papel higiénico, salieron para los pueblos y ciudades como “volador sin palo” (dicho popular) las personas empezaron a decir, “ y ahora que voy a hacer” y múltiples expresiones más… Comenzó el pánico al contagio, a la falta de recursos económicos, a morirse en la calle, un amigo mio me decía, “Richard, estoy “paniquiado”, no sé qué hacer, no tengo trabajo por esta situación y menos dinero para el mercado”, me llamaron muchas personas y me decían los mismo…. Muchas cosas han pasado…

Empezó la presión, “que no salga de casa”, “que si salga, pero solo a pagarle a los Bancos las deudas, al supermercado, y a la droguería”, “que no salga de Bogotá”, “pero que si salga”, “que no entra Bogotá”, “pero que si entra”, “que se ponga el tapabocas”, “pero que no”… la gente entro en un estado de Estrés que no sabemos las consecuencias por ahora, la gente se encomendó a Dios (Hasta el presidente se encomendó a la Virgen de Chiquinquirá), los pastores religiosos hicieron un llamado a sus feligreses para enfrentar el virus … eso sí, ¡dando el diezmo a través de los bancos!, (únicos que están abiertos), “nos llego el fin del mundo”, decían algunos; me llegaron cientos de mensajes catastróficos por redes sociales…. Bueno, un sinfín de cosas que he visto y escuchado en estos días; la policía empezó a perseguir a las personas para colocarles comparendos económicos (No pedagógicos) inclusive a personal de la salud; hay un helicóptero que vuela todos los días encima de mi casa “vigilando” que no salgamos; patrullas de policía con sirenas y luces, megáfono dando “indicaciones” hasta contradictorias… “¿que para dónde va?” ... “que no se demore” … ¡La gente hasta hoy 9 de abril (día aciago en la historia de Colombia) no sabe con exactitud si hay que ponerse el tapabocas, o que si solo hay que bañarse las manos…!

Nuevas disposiciones... “Que no salude”, “que con el codo”, “que se lave las manos”, “Que solo sale una persona de la casa”, “que hay unas excepciones en la movilidad”, “que la mascota la pueden sacar 20 minutos pero a los mayores de 70 años deben confinarlos en la casa”… “Que el simulacro es de tres días”, pero que se extiende hasta el 13 de Abril”, pero que ya no, “se extiende hasta el 27 de Abril”, pero la Alcaldesa de Bogotá dice que no, que hasta Junio, (No se en que criterio científico se basa para ello), Debido a esto las personas entraron en un estrés desde hace como más de un mes y tocara mantenerlo hasta el 26 de Abril al menos.

Como dije al principio del artículo, quiero hablarles de mi experiencia sobre la situación y empezare contándoles, que desde hace casi mes y medio se suspendieron las labores mías, soy independiente y vivo como la mayoría del pueblo colombiano de mi trabajo, eso quiere decir, ¡que no tengo trabajo, ni ingresos económicos!, pero bueno, que se le puede hacer, (por ahí en junio saldrá alguito, si la alcaldesa me deja trabajar); desde antes del simulacro ya estaba en casa, debido a que no habían labores que hacer (a pesar que las había, pero no las podía hacer por el aislamiento) y digamos que desde mas o menos el día 15 de marzo estoy de casero (No por obligación) y me dedique a estar haciendo labores caseras, solo salgo a mercar o a la droguería y trabajar en el computador, yo vivo un una hermana mayor a la que cuido en todo sentido y le tengo dos personas muy cercanas a mi que vienen y me la acompañan todos los días debido a su situación de salud, ahora por el aislamiento ellos no pueden venir a acompañarla; ella tiene una pequeña discapacidad cognitiva (aunque es autónoma, va a al supermercado, sale a caminar por los alrededores, ahora acompañada), tiene epilepsia de toda la vida (esta medicada) y tiene lo que se llamaba Histeria Conversiva, también sufre de periodos de Depresión, pero todo ha sido controlado en la medida que se puede, sin embargo, a partir de las noticias del virus (ella ve los noticieros todos los días) y de la información recibida por ellos, las cosas han cambiado, entró en una angustia por la situación, primero era el abastecimiento de mercado (lo cual no tenía que preocuparse), después que la prevención al contagio (se manejó con indicaciones), los vecinos le decían “no puede salir”,  “debe usar tapabocas”, “debe hacer o cual cosa” (También se manejó, me toco decirles a los vecinos que no se metieran en eso), y ahora con la restricción de genero por disposición de la Alcaldesa, ya no puede salir sino un día de por medio a comprar sus cosas…!

¿Cuál es el resultado de esta situación?, Pues les cuento, que empezó a tener una angustia mucho peor, acompañada de pensamientos negativos y entro en crisis, no quiere bañarse o levantarse de la cama, No puede dormir, se despierta en la noche desorientada, se siente encerrada (Síntomas depresivos), tiene temor exacerbado (Ansiedad manifiesta), entró en crisis convulsivas y en estado de exaltación, para lo cual me toco llamar a nuestro medico de cabecera (Medico forense allegado a mi) y le tocó darle medicamento Psiquiátrico para controlar estas conductas; Para los que me conocen les digo, que esta controlada la situación, digamos que esta estable, pero no bien, llevamos con ella 22 días de aislamiento (cumpliditos, ¿verdad?), pero nos faltan 20 días más, y dudo que se estabilicen sus síntomas con el encierro, pero bueno soy Psicólogo y puedo manejar la situación con ella, gracias a las personas cercanas que se preocupan por ella, mi medico de cabecera, pero definitivamente no gracias a las noticias, no gracias a los consejos de los vecinos, no gracias al pánico generado por nuestros gobernantes; ella ni yo tenemos el virus por ahora ya que hemos tenido las precauciones básicas de prevención, soy consciente que es un virus y no podemos controlar su evolución o contagio, ella lo sabe ya, pero la verdad NO se puede controlar que ella escuche tantas pendejadas que dicen en los medios, de tantas noticias falsas, de opiniones catastróficas, de restricciones ilógicas.. (un día sale el hombre y otro la mujer), en fin, de tanto manejo inadecuado en cuanto a la prevención.

Seguiré viendo la evolución de su salud mental y física; espero que se recupere pronto; estaré pendiente de ella; le controlare los estímulos elicitantes que la están afectando y espero no tener que llevarla a una unidad de cuidados Mentales en una clínica Psiquiátrica (Bueno, creo que no) porque eso sería muy grave.

Curiosamente antes de que entrara en crisis he estado en contacto con colegas Psicólogos Forenses, Médicos Forenses y amigos expertos en estas situaciones y hablamos de todo esto, se me ocurrió diseñar un estudio exploratorio en conjunto con un gran Psicólogo Forense (No coloco el nombre de el hasta que no me autorice para ello) sobre lo que podía suceder con las personas en este aislamiento, diseñamos un protocolo sencillo para hacer el estudio, se elaboro una lista de chequeo, se consiguieron algunos voluntarios que están haciendo sus registros esta semana; quería observar que pasa en el encierro para un análisis forense, pero miren como es la vida… ¡Lo pude hacer en mi casa!... Ahora tendré que analizar lo que les está pasando a los amigos, conocidos, colegas que están haciendo el registro…. Esperemos que les vaya bien… Al final del análisis publicaremos con mi colega los resultados…

Nota: Este articulo es escrito con mi derecho fundamental a la libre expresión u opinión, no es un asunto relacionado con mi profesión de Psicólogo o relación Psicólogo- Paciente, es simplemente una vivencia en medio de la situación vivida en estos momentos y una experiencia más en la vida.

¡Para reflexionar…!   


Artículo escrito por:
Ricardo Alberto Suarez Castro.
Bogotá, Colombia.

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