En estos días se escuchado sobre lo llamado Pandora Paper, que una Asociación Internacional de Periodistas valida como una “investigación” de Capitales económicos de algunas personas influyentes o figuras públicas tienen en los llamados “Paraísos Fiscales” y que al parecer los tienen ahí para lavado de dinero o para evadir impuestos.
En Colombia se empezó con una cacería de brujas con el tema, lo mismo en Chile y Perú donde se han involucrado Presidentes o expresidentes en el supuesto “Escandalo de Pandora Paper” (NTN lo dice); de acuerdo a mi percepción, el periodismo Mundial se dedicó a “investigar” a las personas para ver si tienen capitales (legales e ilegales) en dichos Paraísos Fiscales, quiero opinar al respecto (libertad de expresión Articulo 20 de la Constitución de Colombia) ya que considero que hay algunas cosas que no me cuadran bien sobre el tema, especialmente dentro del ámbito de la constitución colombiana.
Ante todo, quiero
aclarar que todo colombiano puede “investigar”, o expresar su opinión (artículo
20 C.C.), también le asiste la responsabilidad social, la Objetividad y la
imparcialidad como lo manda los cánones del Derecho Fundamental, en este punto
quiero empezar mi reflexión haciendo un par de preguntas: ¿En Colombia es legal
que se investigue a las personas por si tienen bienes en el exterior?, pues de
acuerdo a lo conocido de la constitución colombiano, No se pueden investigar a
las personas sin que medie una situación de ilegalidad o que medie una orden
judicial, o sea que a las personas no se le pueden investigar sus capitales, ya
que iría en contra de sus derechos como el de la Intimidad y a la propiedad (Artículos
15 y 58 C.C.).
Mi otra pregunta sería:
¿Los periodistas pueden investigar a los capitales de las personas en Colombia,
o investigar su conducta?, a todas luces se puede ver que no, nadie en Colombia
está por encima de los Derechos fundamentales de los ciudadanos, aunque ellos
alegan un fuero especial (no sé de donde lo sacan) no pueden estar al margen
del respeto del respeto de los Derechos Fundamentales y del marco de la ley.
En los últimos dos días
he consultado con varios abogados y constitucionalistas y hemos coincidido que
definitivamente el procedimiento de los periodistas no es adecuado y a la final
no tiene validez y lo que genera es la incertidumbre y la sombra de duda (NTN) sobre
las personas involucradas en esa lista de Pandora. (Derecho a la honra articulo
15 C.C.).
Otra pregunta: ¿La información
obtenida sirve como prueba de un delito o una falta a la Ética?, Pues no, ya
que al no ser legalmente adquirida no es conducente, pertinente o legal y no
deja de ser un cuestionamiento de Ética sobre eventual evasión de impuestos y
nada más, esto debido a que esa información sobre empresas o manejos financieros
en su mayoría son legales. En este punto quiero aclarar que personajes de la
vida pública o funcionarios públicos y sus familias tienen derecho a poseer
bienes y declararlos y pertenecer o integrar empresas en el exterior.
En un artículo de opinión
del Espectador, una periodista cuestiona ese punto de la Ética, sin embargo, aquí
vemos que ella no cuestiona la ética sobre como se hizo la “investigación” de
sus colegas, manejando una información segada y colocando en la picota publica
a los “involucrados” como el Presidente Piñera, Lasso, a los expresidentes
Gaviria, Pastrana, e inclusive a la Vicepresidenta Ramírez; De acuerdo a lo que
tengo como información al parecer, ellos tuvieron empresas hace tiempos con la
modalidad “off shore” y ahora están salpicados por el pseudo escandalo Pandora
Paper. ¿Es eso ético?, pues lo dejo a la opinión de mis lectores, pero creo que
habría que analizar cuál es el límite de la Ética.
Aquí en Colombia y
en el mundo estamos en un mar de caos, hay conspiraciones, Corrupción, chismes
de barrio, politiquería con mala intención y vemos que los medios de comunicación
se prestan para intereses particulares en muchas ocasiones, cada cual da la
misma noticia de diferente forma y de acuerdo al “pensamiento” de cada medio de
comunicación, algunos amarillistas, otros algo más serios o de pronto, uno que
otro serio en realidad y que tiene credibilidad.
Con respecto a esto último,
la palabra credibilidad, tiene sus consideraciones, ya que ni siquiera tiene
una connotación de verdad, es curioso, muchos jueces, magistrados y demás se
basan en la “credibilidad” que le dan a testimonios o informaciones que les
presentan en las investigaciones, sin embargo, eso no da para asumir que es la
verdad y que el hecho sucedió. A propósito de lo anterior en mi trabajo como
Perito he encontrado acusaciones de la Fiscalía que se basan solo en lo dicho
por un menor asumiendo que es verdad lo que dice, sin que medie una investigación
verdadera, sino testigos de referencia que “escucharon”, etc.
Las investigaciones
en general tienen un método y es científico, tiene sus reglas, puede ser
Deductivo o inductivo (todos saben que significa esto) y se basa en una premisa
inicial que se asume como verdadera y se plantea una hipótesis, la cual se debe
comprobar o descartar y llegar a una conclusión, en esto se basa el
conocimiento, así sea técnico o Social, etc., tiene una metodología y un
objetivo, no podemos generalizar de forma indiscriminada un concepto o una afirmación,
debemos ser cuidadosos en nuestras investigaciones y en nuestras conclusiones.
En mi concepto lo de
Pandora Paper es un fraude periodístico, ya que usan una información que no
presenta veracidad más allá que algunas personas tengan unos bienes en países que
no son los suyos, estamos en un país globalizado y el derecho a la propiedad es
inviolable, no se puede usar la información de los ciudadanos en contra de
ellos con el objeto de una primicia o lo que llamamos en Colombia una “chiva”; aquí
en Colombia la persona es inocente hasta que se le compruebe lo contrario y no
al revés; el efecto de “pandora paper” es desastroso ya que les está tocando a
las personas “justificar” sus bienes y sus conductas exponiéndose a la “sombra
de duda” sobre su conducta; en una red social vi un comentario de un político en
campaña diciéndole a sus seguidores que él no tenía negocios en el exterior y
que era una persona legal que paga impuestos, no entiendo como los ciudadanos
debemos “justificar” nuestra conducta ante los periodistas.
Nota: Este articulo está
escrito usando mi derecho de libertad de expresión y opinión, solo refleja el
pensamiento del autor de acuerdo a la información dada públicamente, no se investigó
a ningún periodista o persona para dar esta opinión. En ningún momento se investigó
la intimidad de ninguna persona o se usó información privilegiada protegida por
la Constitución Nacional en su artículo 74.
Artículo escrito
por:
Ricardo Alberto
Suarez Castro
Un ciudadano común.
