Estamos en mayo, mes que se celebra el día de las madres, donde se honra la labor de madres a estas mujeres, sin embargo, hoy escribiré sobre las madres que no son realmente buenas madres, sino que tienen una conducta inadecuada o maltratadora hacia sus hijos o parejas.
En estos días curiosamente me han llegado un par de casos de violencia intrafamiliar, en los cuales esta acusado el padre de los chicos de maltrato, sin que exista evidencia forense o real del supuesto maltrato.
Sin entrar directamente en el análisis de los casos, hablare de esas madres perversas que usan a sus hijos en contra de sus parejas, sin importarles las consecuencias a corto y a largo plazo no solo a sus parejas, sino a sus hijos.
Las acusaciones falsas de maltrato hacia las mujeres son mas frecuentes de lo que parece, las comisarias están llenas de esas denuncias, asi mismo, en las dependencias de la Fiscalía y el ICBF, todo surge a partir de una separación o en su defecto a partir de las malas relaciones de pareja, por venganza o solo por el hecho de “joder” a su pareja.
Todo empieza con una “denuncia”, ante cualquier institución donde se “reportan” ciertas acciones de supuesto maltrato por parte de la pareja de la supuesta “victima” y esa versión es validada como cierta por parte de quien la recepciona, esto a la vez inicia o una noticia criminal o una querella por maltrato, solo se necesita tener “evidencia” de una discusión o cualquier acción para instaurar la respectiva denuncia.
Hace poco en un caso mío el supuesto maltrato fue sustentado por una Evaluación Psicológica donde la profesional determino que la señora era víctima de Maltrato Psicológico por parte de su pareja en grado de sospecha, según el DSM-5, Manual de diagnostico de trastornos mentales, sin que mediara un diagnostico real del supuesto maltrato.
A partir de estas “sospechas” se inician las medidas cautelares o acciones por parte de los operadores judiciales, donde el posible victimario queda bajo la condición de maltratador y se le inicia todo un proceso. En este punto hay que resaltar que no existe una investigación de fondo por parte de las autoridades, sino que es suficiente la versión de la supuesta víctima.
Dentro del contexto de lo anterior, he encontrado que muchos de estos casos denunciados, no solo son contra las mujeres como víctimas, sino que se denuncia que sus hijos, han sido “tocados” sexualmente, maltratados psicológicamente o físicamente por los padres, sin que exista un sustrato que sustente, tal afirmación.
Como vemos, existen “declaraciones” falsas que involucran a los niños en contra de su padre, convirtiéndose ello en una clara situación de Alienación Parental, o de un Maltrato Psicológico grave hacia el menor, convirtiéndolo en “victima” sin serlo y causándole daños psicológicos que con el tiempo podrían repercutir negativamente el libre desarrollo psicológico del menor.
La conducta perversa de la madre es reprochable en todo sentido, ya que utiliza a menores indefensos para sus acciones en contra de su pareja o mejor, contra “el papa de niño”, ya que generan conflictos en la relación del menor con su padre y el rompimiento del lazo afectivo entre los dos, llegando hasta situaciones de odio hacia el padre.
Las mujeres que realizan estos actos usan varios mecanismos de maltrato como, el no dejar ver a los hijos, “extorsionar” al padre con amenazas de denuncia, uso arbitrario de la custodia, manipulación de los afectos del menor, denuncias reiterativas de abusos que no existen en diferentes instancias, actitudes agresivas, rompimiento de la comunicación y, en fin, varias situaciones que generan una disfunción familiar bastante grave y compleja.
En nuestro medio, desafortunadamente, se inventaron algo llamado “Violencia de Género” y lo que dicen las cortes “perspectiva de género”, la cual, los operadores de justicia deben “ver” el conflicto con ojos de mujer, considerándola víctima, sin necesidad de realizar una investigación real de los hechos que suscitan esta situación.
Seguramente algunos de mis lectores dirán que no todas las madres son asi, y les hallo la razón, sin embargo, desde soy Perito, he encontrado cientos de casos que me dicen que un buen porcentaje de madres usan a sus hijos como instrumentos de alienación.
En estos días vi una pauta publicitaria de la Fiscalía, donde decía que uno de cada cinco menores, es abusado sexualmente y que al parecer eso sucede dentro de la familia, de acuerdo a mi experiencia de 23 años como perito en estos casos, eso no sucede así, eso es una exageración y un dato que no tiene respaldo dentro del contexto forense, mirando las estadísticas de menores en Colombia existen 15.454.633 y si cada cinco uno es abusado, tendríamos 3.090.926 de niños abusados en sus casas y eso no corresponde a la realidad; La procuradora general en una declaración dijo que había en 2023, había 1232 “denuncias” por abuso sexual en menores, y uno se queda pensando, si en realidad esa cifra de “denuncias” son ciertas, eso sin contar las de maltrato y demás, que no las cito.
Las anteriores cifras son dadas solo contando las “denuncias” o las valoraciones realizadas en medicina legal, las cuales no tienen valor, ya son solo eso, denuncias o valoraciones que no determinan el abuso.
Debemos reflexionar sobre esa situación en este mes de mayo, ya que para los católicos celebran el mes de la Virgen y se supone que las madres son imagen de lo bueno dentro de la relación familiar y no olvidemos que los afectados son los hijos, además, de la unidad familiar.
Nota: A propósito de estadísticas, de acuerdo a la Policía Nacional, el día de la madre se presentan el mayor numero de riñas, muertes, heridos en el marco familiar.
Para reflexionar …
Artículo escrito por:
Ricardo Alberto Suarez Castro
Perito Forense
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